lunes, 28 de marzo de 2011

Descendía el sol por el oeste


Yo vi a esa vieja en una patineta de bondiola,
cuando el sol se apagaba y mi mamá decía 'hola'.

No andaba muy rápido la anciana,
la grasa de la bondiola un poco la frenaba.

Mi mamá solía mostrarme viejas patinando en bondiola,
el ferretero saludaba y mi mamá decía 'hola'.

Y patinaba por Corrientes, y patinaba por Lavalle,
tomó buena velocidad esa bondiola en la calle.

Las ruedas eran chorizos y la señora era calva,
vestía camisón gris y un velo de tul ambar.

Mi mamá decía 'hola' al panadero de la cuadra,
la vieja aceleraba en su bondiola alta cilindrada.

De golpe la patineta, de la vieja, se hizo Harley,
de bondiola,
el mendigo saludaba, y mi mamá decía 'hola'.

Y la vieja saludó a mi vieja, y mi mamá le dijo 'hola'.
La señora no vio el sesenta, que impactó contra su bondiola.

Y a la mierda con la vieja y la moto de bondiola.
"Triple fractura de cadera y fémur", diagnosticó la doctora.

Mi mamá me enseñó que es un buen fiambre la bondiola,
y la saludó un policía, y mi mamá le dijo 'hola'.